martes, 8 de septiembre de 2015

Para ti, sí, para ti...

Te amaba. Nunca sabrás cuánto. Y ni te preocupaste en averiguarlo: sólo recibí de ti gritos, insultos, desprecios. Y pronto me hiciste saber que había "otra". Virtual, eso si, pero ella era quien a ti te importaba. Y a quien tú amabas. Tal vez por eso, porque era virtual. Ridículo, eso me parece, ya que ella nunca quiso conocerte. Tal vez, también porque tú también eras virtual. Y eso es más cómodo y así podía irse con sus amigas de viaje aquí y allá. A cualquier sitio menos donde tú vivías. Ahí era yo, la tonta del bote que iba una y otra vez cuando tenía días libres. Era yo la que soportaba tu mal humor, tus desplantes, tus desprecios. No sé cómo ni por qué aguanté tanto. Bueno, sí lo sé: porque te amaba y creí que tü también a mí. Pero ya ves. Todo era una farsa y aún hoy que ella ya no está (desgraciadamente falleció) tú aún la amas con más fuerza. Pero al final desperté y supe que no debía soportar mas tu maltrato. Sí, tu maltrato. Porque esa forma de tratar a una persona no tiene otro nombre. por mas que quieras seguir insultándome NO TIENES NINGUNA RAZÓN NI NINGÚN DERECHO.

Te amaba y ya no te amo. Pero te deseo todo lo mejor. Al menos en eso no me parezco a ti que me deseas todos los peores males. No te deseo que seas feliz porque si no cambias (y eso es imposible) nunca podrás serlo. Pero es lo que podría desearte. Al menos intenta olvidarme que ya veo que no lo consigues.

Adiós.

viernes, 1 de mayo de 2015

Es curioso...

Es curioso, ¿sabes? estás intentando atravesar la noche de puntillas, pensando casi en silencio para que la noche no se rompa y viene a destrozarte todos tus esquemas el camión de la basura con su escandalosa música, vaciando los contenedores con infernal estruendo, haciendo que se despierten algunos muertos al recordarlos tú en la letanía que rezas al oírle.

Menos mal que algunas veces aprovecho para que se lleve de paso algunos de mis recuerdos.

Eso es lo que le salva....

Adel

lunes, 16 de marzo de 2015

Reencuentro

Joooooo que bieeeen...he entrado de casualidad intentando recordar la contraseña que no me la admitía. Y hasta me había abierto otro blog....aunque ya me he acostumbrado a escribir en Facebook. Bueno al menos no he perdido este blog....

jueves, 2 de octubre de 2014

!No!

Siempre decía que sí, que vale que de acuerdo. Siempre di la razón, nunca llevé la contraria. No por caer simpática ni por intentar agradar a los demás. Yo era así. Hoy he dicho que no Y hasta yo me he sorprendido. Y no es que estuviese enfadada o algo así. Es que creo que he empezado a quererme... Algo tarde, pero bueno.. Y hasta creo que me ha parecido justo. Y me ha sentado bien.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

No queda otra...


Y de nuevo la rutina
 Un año más,
Una vez más.

 Las calles como siempre
atestadas de coches.
 La basura en la esquina
apestando el aire.

Y yo intentando vivir otro

año sin ver el mar.
Si  sentir su rumor
Ni su olor.

Habrá que
 acostumbrarse
Intentar no naufragar
Y no ahogarse de pena.

No queda otra...

lunes, 22 de septiembre de 2014

Anoche, sin apenas darme cuenta se me escapó un poema. Lo vi pasar, de pronto, delante de mis ojos... y dejé que se fuera. No tenía ni la más mínima idea de que fuese mio. Hace demasiado tiempo que no veo pasar un poema ante mis ojos; fue tan extraña la sensación que ya no pude dormir en toda la noche y me dediqué a recorrer cada centímetro del techo por si alguna palabra se hubiera quedado pegada y pudiera darme alguna pista de sobre qué iba el tema. Pero nada. Ni siquiera de esa mancha de humedad de la esquina, junto a la ventana, esa que en otros tiempos llegara a inspirarme alguna que otra historia.
Pero ya digo. Mi inspiración sigue de vacaciones o declarada en huelga indefinida.
Cerraré los ojos de nuevo. Tal vez así consiga atrapar el sueño o en un descuido pueda atrapar ese maldito poema que tan sutilmente se  esfumó ante mis propias narices o a algún otro que se digne pasar ante mis ojos.

Adel

sábado, 20 de septiembre de 2014

Tiempo de vendimia

Tiempo de recoger el dorado fruto de la dicha así como también el morado, casi negro del dolor. Septiembre ofrece sus frutos al verdugo, como doliente reo al filo de la espada. Roja sangre de dorados racimos. Nada importa el color. Es tiempo de lágrimas doradas o rojas. Llanto por sangre propia; dolor en carne hermana. Al menos el mar es y será su consuelo cercano, su refugio, su morada. Ella, al menos lo ha logrado.. El tiempo de mi vendimia ignoro si será cercano al azul; a mi amado azul. Tan lejos de donde se malogran tristemente mis viñedos. Adel